vosotras

me cubren los ojos con barro
cae en mis labios cerrados

olvido las manos que cuelgan
son mías las que me sujetan

llega a mi vientre la hiedra
en mi ombligo las ramas se esconden

y cuando se asienta en el cuello
cómo hablar si soy de barro
cómo apartarte si no tengo manos

me gustaría decirme
son vuestras voces

quien me devuelven mi cuerpo

purpose

cross that desert
swim that river
reach that moor


please


even if it's only 
to let women after you
reach a bit further
i wish every year that passed
you grew a year younger
maybe at forty we could drink wine
and laugh at our partners together

at fifty i'd help you move out from college
and yet cry again when you left home
at sixty i'd tell you
you're the best woman i've ever known
at seventy i'd hold you in my arms

and hushed you to sleep
i'd bathe you with parfumes
and smile as you discover
how big the world is
but it would never get to be
a greater love than yours


- mom

wingless moths

if they met my eyes
entangled hands

quizzical glint
and asked
would you like to know?
lips
unable to part
i'd nod
i'd lay on my back
is there a sea on the ceiling?
and i'd leave after a while
as if a fast motion
could shatter me —glass—
i'd kiss goodbye the door
my brain has escaped my body
what lies ahead needs to be filled
with wingless moths
paint over dust
my honey limbs
will drop when you don't look
this is why
love
i could never let you taste
the nectar in my mouth
these bees sing me to slumber

we

i used to look at you
you were so tiny
and knew so little

i still can reach you
in the blink of an eye
i'll see you under the blankets
after so many nights
counting back from one hundred
and talking to god

now your hair's longer
always dreaming about college
the world's about to grow
but you're still so tiny
and know still so little
you've started looking back

i just wonder if you're tired
if you've finally learned something
are you seeing through me now?

siete bolitas

una bolita negra
que se acerca
me besa el zapato

hay otra blanca
que me mira
se relame los labios

la gris se me sienta
entre mi ropa
se queda dormida

y yo no hago nada
estoy atrapada
en este día de otoño

doors

too often stuck in between
the words i left behind
understand
it's easy to just shut my eyes
and 
fall

when i said let me go
you laughed
and stood by the door

i'm sure you just thought
you were so romantic

it was not the first time
and i still kept silent
i
silent

it happened again
in another country
when i found myself free

but
if i was free
why did he block the door 

i'm sure he doesn't even remember
he'd laugh it off over a coffee
and i was erased

it's that simple, right

too often stuck in between
the words i left behind
please, understand
it's easy to just shut my eyes
and 

fall

Verde

No siempre ocurre. Solo a veces. Es a veces, cuando el verde se mezcla, sin quererlo, con otros colores. Cuando las vallas parecen líneas infinitas que conducen a un solo lugar. Cuando la música acompaña al ruido del motor y las voces son solo eso: voces.
Es a veces, cuando me confundo entre el verde y el negro, entre abrir y cerrar los párpados. Entre querer y no querer.
Cuando no sé si darle vía libre a otras voces, que no son solo voces. No sé si es mejor adentrarme en las imágenes, perderme en las medias verdades.
Y es que es a veces, cuando me encuentro en la mitad. Cuando veo cómo el camino se bifurca a lo lejos. Cuando puedo sentarme en la tierra y mirar de frente.
Y, solo a veces, olvido todos los caminos que dejé atrás.

my legs

golden threads climp up
climb down
while some of us can't see them
there's others who'll look
and try to pull them out
unaware that when they do
the gold'll turn black in their fingers
and with a dry taste in their mouths
their smiles will drop in an instant
i used to look at her from the clouds
and it felt good
and windy
and cozy
as easy as putting a penny in your pocket

i just didn't know what would sting the most
wouldn't be the fall
but not knowing
if i'm under
or above

just thinking that it'll never be
besides

we've grown too apart to notice






- some people are so bitter

Palabras y palabras y palabras y palabras y


Es ridículo. Tan ridículo que ya ni da pena. Tan ridículo que solo queda sonreír. Y es absurdo es absurdo es absurdo que suene el teléfono y que escuche esa voz y que no pase nada. Que es esa voz y son palabras y palabras y palabras y palabras y mentiras.
Que una parte de mí lo busque, sin querer.

Y esa parte, pobre parte, perdida parte, pequeña parte, no es tan pobre, ni perdida, ni pequeña. Esa parte descuelga, escucha y responde.

Es absurdo. Tan absurdo que no ve. Tan absurdo que ni se atreve a escupirme en el espejo. Y es ridículo es ridículo es ridículo que te grite y no te grite y que no escuches. Que sea mi voz y sean palabras y palabras y palabras y palabras y mentiras.
Que una parte de mí lo encuentre, y quiera.

Y es ridículo. Tan ridículo que lo escriba, cuando ni siquiera es real.

C:

Es un poco extraño. He pensado en ti muchas, muchas veces. Aunque ni siquiera sé tu cara. Aunque ni siquiera sé tu nombre. 
He pensado en ti, mirando al techo. 
He pensado en ti, cerrando el puño. 
He pensado en ti y se me ha roto el alma.
Y el jueves pensé en ti. Pensé en ti más que nunca. Y grité hasta que me dolió la garganta. Grité hasta que las palabras se mezclaron unas con otras, y al mismo tiempo, cobraron cada vez más y más sentido.
Y no sé si tú estarías gritando o no, si tendrías fuerzas para despegar los labios. Solo sé que tu voz me llegó.
Tu voz nos ha llegado a todas.

True love waits

I wouldn't even know how to start. At first, you cannot recognize the voices at all. You cannot grasp the end of the words, the meaning of the sentences. It begins slowly, with a subtle motion of your fingers, with a little tickle in the nose. Maybe, if you're lucky, the pacing will grow. Steadily. Almost hungry, the letters will clear their own path. Shy steps on the grass. Distant sounds that sprout over the silence.

Only for an instant, you may grasp these voices. You may see different hues and accents, before they all merge together. Before they all become one and their echoes fade away. Before you ever understand what you always longed to hear.

pobre, perdida, pequeña


pronunciaré estas palabras
aunque corrompan este poema
aunque no pueda probarlas
prometo pisar esa piedra
para no parar
pero siempre sin prisa, perpleja
pequeña
de párpados pegados
sin creer mis propias promesas
porque a veces perderé si pienso
en tu pelo tu pulso tu cuerpo


donde no los quiero

Vivas, libres, unidas


Sé que hay mil cosas que deben cambiar. Sé que todavía hay mucho camino por recorrer. Pero no puedo evitar mirar atrás y que una extraña calidez recorra mi cuerpo de pies a cabeza. Por primera vez miro atrás sin querer que te atraviese mi voz, sin querer que te veas en mis ojos y nazcas de nuevo. Por primera vez, simplemente te miro, sentándome a tu lado, apretando tu mano con fuerza. Y no importa si no puedes verme o escucharme. No importa si eres solo un reflejo, un recuerdo. Solo quiero tenerte entre mis dedos un momento, contemplarte con un brillo nuevo en mis ojos.
Solo quiero decirte que cada día habrá más luz.

still, silly, small

i'm gonna have to say this sound
even if it seals me off
even if it soils every song
i'm gonna have to step on that stone
if i don't want to stop
always slow, steady
silent
eyes shut
seeming sort of satisfied
sometimes i'll come across your name
your face your touch your not-so-steady hands

where i don't want them

La niña callada

Era una niña y ay
era una niña, perdónala.

Sé que no debería perseguirla. Pero hay una parte de mí que no puede evitar verla en su reflejo. No puede evitar reconocerla en esas frases que no digo, esas veces que finjo olvidar. Y se mira y la ve y no hay nadie más. Se mira y no se ve y

dónde estás.

Y ese trocito de mí es el mismo que a veces recorre sus recuerdos, sin querer, en busca de esa niña callada. Y la miro, siempre con la esperanza de que se encuentre con mis ojos. Siempre con la necesidad de que escuche mis palabras, que quieren enseñarle a gritar, a decir que no. Solo quieren dar fuerza a su voz.

women like you drown oceans

you thought you could keep her silent
cause her voice hurt your pretty ears
but she was not a blank paper 
you could write off
she was not an empty box
you could fill with your words
she was full of ink and melodies
she was drops of water and alloys
difficult to shape and 
not easy to crack

Much sought and seldom found

there's this little secret
sometimes ain't little at all
there's this truth I hardly find
in the corners of your mouth

there's this crystal light
and it dies if being touched
there's this fear I won't grab
these rare flames with my hands

and there's a silent thought
it creeps along my spine

is there any chance
they don't slip through my fingers?

what do you mean this happened to me?

no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no, y tus labios se despegan, sin quererlo, sí.

Y las veces que dijiste no desaparecen. Tienen que hacerlo.

no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no y el eco de esas voces y el tono de esas voces y qué dicen esas voces joder y esas voces, sí.


Y ríete, corazón. Es lo único que puedes hacer con tu voz.

Mamá

Siempre me dije que yo lo habría hecho diferente, que duele no saber. Me prometí ser paciente, escuchar las pequeñas cosas que la harán sonreír, que la moldearán poco a poco. Y ahora, a veces suspiro, temblando por la idea de que se nuble su vista, de que callen su voz. Y me recuerdo y nos recuerdo y no sé nada.
Me escondía, y me encontrabas, y ahora no sé dónde estoy y tú tampoco. Y yo solo quiero que me encuentres bajo las mantas los sábados por la mañana. Que me mires y me veas y sepas, sin saber.
Y nos sentamos, durante horas y creo que ya casi ya casi ya casi ya casi ya casi.
Otras veces me llamas y te siento y tu voz y tu tono y tus preguntas y las preguntas que no hago.
Tu vida tu vida tu vida y me pesa y mi vida y lo eres y lo soy.

No lo decimos nunca y no lo decimos nunca y ya casi ya casi ya casi.

Un pozo que a veces mira al cielo

Muchas veces, los fines de semana, al despertar, me quedaba quieta en la cama durante unas horas. Empezaba a jugar con la vista, a enfocar y desenfocar las imágenes que se encontraban delante de mí. Miraba las paredes imaginando formas, figuras en el gotelé. Mi actividad favorita era cerrar los ojos, frotármelos, y empezar a descomponer los colores borrosos que aparecían al mirar fijamente una luz. Más tarde aprendí que se llamaban fosfenos, pero en esos momentos eran un misterio para mí, algo nuevo que flotaba en mi mente. Y me fascinaba descubrir que cuanto más te concentrases en los colores, en las formas, más precisos se volvían, más moldeables. Los podías definir, volverlos imágenes casi nítidas, casi verdaderas. Y tal vez fuese eso lo que más me atraía, que fuesen inacabadas, nublas. Imperfectas.

Fue entonces cuando empecé a sentir algo nuevo. Algo que ni siquiera podía entender del todo. Un agujero en el pecho, que latía débilmente. Un agujero que siempre había estado ahí, pero era tan tímido que nunca se había atrevido a silenciar mis otros pensamientos, a interrumpir otras sensaciones y abrirse paso. Sutil y paciente, solo quería hacerme notar su presencia, decirme que un día podía llegar a llenarse.
Quizá el día que sintiese que podría abrirme a alguien y hablar de tabúes sin cuándos, dóndes y de mil maneras. Hablar de los colores que vemos al cerrar los ojos, de los agujeros que van surgiendo poco a poco para llenarse en un futuro.

Aunque lo que no sabía, la noche que intenté llenarlos por primera vez, es que con la misma facilidad que te completan, te vacían sin dudarlo tan siquiera un segundo. Se duplican y a veces te hacen sentir que no hay espacio para nada más. Y solo eres una serie de agujeros por los que no puede ni pasar el aire. 

Y cuando eso ocurre, cierro los ojos. Y respiro. Intento llenarme de esos colores.

No.

Me encontré con sus ojos, cómplices. O tal vez ellos me encontraron a mí. Tal vez ya lo sabían antes de estudiar cada surco, cada matiz de su reflejo. Sin dejar de contemplarse y a tientas, buscó mis manos, trazó círculos sobre mis uñas. Creo que fue entonces cuando fui consciente de lo que escondían. De lo que no estaba oculto en absoluto. No. Nunca lo estuvo.

Y sabía que había estado esperándome. Que desde hacía más tiempo de lo que quiero imaginar se reconoció en mis ojos. En la manera en la que a veces se pierden. En el camino que recorren por inercia. En esos puntos en los que se quedan clavados, sin querer.

Y por fin pude verme en los suyos. Pude identificarme en la mueca de sus labios, en las pausas reiteradas de su voz. Era como si, tan solo al rozar la superficie, borrase los colores, las formas que nunca habían existido. Como si todo lo que dejaran atrás fuera un espejo.

That there

I don't always feel this power. Sometimes it's not waiting just around the corner. It's not hiding under my nails, behind my tongue. It's gone. It leaves without a trace, unable to prove it once existed. 


It once existed.



Sometimes I cannot even know. I just have to trust it's there. I just have to think I'll find it before the sentence is over.